viernes, mayo 30, 2014

«Carmen» en color... negro



 Por: Germán A. Ossa E., Geross
Director: Otto Preminger 
Intérpretes: Dorothy Dandridge, Harry Belafonte, Olga James, Pearl Bailey.

Última película del Ciclo “Ópera y Ballet” que tendremos oportunidad de ver en el marco de los talleres de apreciación cinematográfica que dictamos en la sala alterna del Santiago Londoño, auspiciados por el Instituto de Cultura de Pereira el miércoles de la semana que viene a las seis y media de la tarde.

Carmen Jones (Dorothy Dandridge) es una seductora trabajadora de una fábrica de paracaídas que intenta robar el corazón de Joe (Harry Belafonte), un soldado enamorado de Cindy Lou (Olga James), su novia de toda la vida. Cuando tras una reyerta femenina, Joe sea obligado a acompañar a Carmen a la prisión, ésta terminará conquistándolo y atrapándolo en una peligrosa vorágine de ofuscación afectiva.

Un sobrevalorado musical de Otto Preminger, cuya mayor significación es la utilización de un reparto completamente nutrido de intérpretes negros, destacando entre ellos la presencia indomable y sensual de la legendaria Dorothy Dandridge. Harry Belafonte empezaba a ser reconocido apenas.

La película adapta la ópera de Georges Bizet (quién había adaptado previamente la obra de Prosper Merimée) y es destacable por su música, ya que las letras de Oscar Hammerstein Jr. suenan desafinadas en más de una ocasión, en especial en los momentos más melodramáticos, y los números musicales carecen de imaginación y excitación visual, a pesar del buen empleo de ese incipiente Cinemascope por parte de Otto Preminger. 

La historia de obsesión y perdición amorosa, celos patológicos y aguerrida “femme fatale”, es bien conocida por todos, pero variando escenarios y nombres. José es Joe, la cigarrera es una fabricante de paracaídas, el militar español en la época napoleónica es un soldado del ejército estadounidense en plena Segunda Guerra Mundial y el torero aquí, es un boxeador.
Dorothy Dandridge, que sería nominada al Oscar como mejor actriz, siendo la primera persona negra en conseguir una nominación como intérprete principal (Hattie McDaniel había logrado con anterioridad la estatuilla como mejor actriz secundaria), y Harry Belafonte, ese popular vocalista de calypso y baladas románticas con escalofrío, forman una pareja muy atractiva y, aunque ambos eran más o menos conocidos cantantes, no emplearon sus verdaderas voces en este título, siendo doblados por Marilyn Horne y Le Vern Hutcherson, más dotados para los registros operísticos.

Hermosa cinta poco difundida, que se distribuyó con pánico en los cines comerciales manejados por Hollywood (la meca del cine pero mafiosa al fin y al cabo), tiene ahora una espectacular oportunidad para ser apreciada por los verdaderos amantes de la Ópera y obvio, del excelente cine.

domingo, mayo 04, 2014

Afiche del Encuentro 2014